El judaísmo en sí
Los judíos son uno de los pocos pueblos antiguos que han sobrevivido a los tiempos modernos. El judaísmo es una de las religiones vivientes más antiguas del mundo. El judaísmo y sus libros sagrados unen al pueblo judío. Ya sean religiosos o seculares, los judíos están conectados por la ética y los valores que el judaísmo enseña. Los padres han pasado la tradición a sus hijos, y los hijos a los suyos y así por miles de años, dijo Abigail Pratt, sirviendo con Cristianos Unidos por Israel.
El judaísmo es la más antigua de las 3 religiones del libro o abrahámicas, pero la menor en número de fieles. Otras religiones trascienden varias naciones y culturas, mientras que el judaísmo se considera la religión y la cultura de un pueblo específico. El judaísmo no exige a los no judíos unirse al pueblo judío ni adoptar su religión, dijo Abigail. El judaísmo es considerado no solo como una religión, sino también como una tradición, una cultura y una nación. Además, algo que lo caracteriza es el no estar basado en “milagros”, sino en la experiencia personal de cada hombre, mujer y niño.
El término judaísmo se refiere a la religión o creencias, la tradición y la cultura del pueblo judío, pero si estás buscando una definición sobre qué es el judaísmo acá va un intento: es una religión que posee componentes étnicos y nacionalistas, está vinculado a una tierra y a un lenguaje particular, añadió Abigail.
Un pueblo con propósito
¿Por qué hay tanto protagonismo judío en la Biblia? Esta es una pregunta frecuente durante conversatorios y seminarios. La respuesta más encontrada es que Él los ama, así como ama a toda Su creación. Pero hay ciertamente un sentido en el que la profecía bíblica parece enfocarse sobre el pueblo judío. Eso es debido a que Dios llamó a los judíos a ser Su pueblo escogido, a través del cual Él cumpliría Su plan maestro para la historia (Dt. 7:6), dijo David Reagan, sirviendo con Ministerio Cordero y León. Fue a través del pueblo judío que Dios dio al mundo Su Palabra. Y fue a través de los judíos que El envió al Mesías.
Las Escrituras hebreas dicen que los judíos también fueron escogidos para ser testigos de Dios de lo que significa tener una relación con Él (Is. 43:10-12). No solo eso, sino que, en tiempos antiguos, debido a su ubicación estratégica, el pueblo de Israel se convirtió en un punto de encuentro para todas las naciones del viejo mundo gracias al comercio, permitiendoles compartir del evangelio con cualquiera que pasase, dijo David. Para muchos cristianos, los judíos también son el reloj profético de Dios. Él a menudo relaciona futuros eventos importantes con cosas que les ocurrirán a los judíos como nación.
La profecía de las 70 semanas de años de Daniel es un buen ejemplo. Al igual que en el N.T. cuando Jesús les dice a Sus discípulos que volvería después que los judíos sean dispersados, Jerusalén sea pisoteada y ya no esté bajo el control de lo gentiles (Lc. 21:24), dijo David. Dios tiene un plan especial para ti, y del mismo modo tiene un plan con y para los judíos; y no descansará hasta que se cumpla