Moldeada por el Señor: lecciones de carácter en Asia

Vasti, boliviana, lleva dos años en Asia sirviendo con niños y adolescentes, abarcando orfanatos, colegios y otros lugares donde puede apoyar a la gente.
¿Qué situaciones en el campo han desafiado tu carácter profundamente?
Yo me animaría a decir que mi carácter sanguíneo, también soy jovial, me gusta compartir y sonreír con las personas. Aquí eso no se puede, por ejemplo: si yo estoy con un grupo de personas en la calle, no puedo reír, debo tener mucho cuidado, no puedo mirar a la gente de frente, no puedo salir tarde de la casa, etc. Son situaciones que desafían mucho, mucho mi carácter aquí, así que me está costando un poco. Estoy contenta de estar avanzando paso por paso, pero sí es un desafío.”
Sobre este desafío: ¿Puedes compartir un momento en el cual tu carácter fue moldeado antes o durante el tiempo de servicio?
“Algo que aquí me está enseñando mucho es la dependencia del Señor. ¿Por qué? En mi vida cotidiana, yo programo muchas cosas que digo o que voy a hacer, como: ‘voy a ir a visitar, aquí tengo que hacer esto, etc.’
Pero repentinamente, hay protestas, actividades, festividades musulmanas que te obligan a estar en casa por protección, y eso obliga a un extranjero a no poder salir a la calle. Aquellas cosas me están ayudando mucho a entender que no es en mi tiempo, sino que es en el tiempo del Señor.”
¿Cómo enseñas o moldeas el carácter cristiano de los nuevos creyentes en el campo?
“Tengo una amiga que tiene muchas preguntas y ella está buscando a Papá. Se aleja, vuelve, se aleja, vuelve, y así repetidamente. Ella tiene sueños muy grandes.
En este caso, yo tengo mis tiempos de oración por ella, oro mucho por ella y cuando se da la oportunidad de dar algún consejo o brindar alguna ayuda para que ella pueda mejorar en su carácter, siempre trato de decirle con amor, con ejemplos y trato de no ir en su contra o juzgarla.”
¿Qué consejo darías a los jóvenes que quieren servir, pero aún están luchando con su carácter?
“Confíen en lo que Papá tiene para ellos. El carácter es algo que siempre vamos a estar moldeando. Nunca vamos a terminar de moldear nuestro carácter, siempre vamos a tener delante un reto para desafiarlo.
Pero de algo estoy segura: si nosotros pensamos que tenemos que ser perfectos para salir al campo, estamos equivocados. Porque Papá sabe cómo usarte, dónde usarte y a través de qué usarte en la misión.
No te rindas. Porque no somos perfectos. Él sabe cómo usarte, así que déjate guiar.”
Lee más sobre este tema en la Revista VAMOS edición Carácter misionero
Precioso!! Saber que nuestro padre nos mira con misericordia y sigue su obra en nosotros por amor..debemos dejarnos moldear por su gracia!!
Qué lindo testimonio! Sin duda no lograremos ser perfectos en esta tierra, el Señor sea obrando y su Espíritu transformando nuestras vidas según su voluntad. Llevándonos a dónde Él quiera que vayamos