Como cristianos, el cierre de las iglesias y el aislamiento social nos ha provocado una pérdida y nostalgia del tradicional servicio dominical y estudios bíblicos de semana; y sin embargo, una solución alternativa fue el uso de plataformas o transmisiones virtuales para continuar 'congregando' juntos.
Por ello, el discipulado y consejería deberían continuar y con mayor énfasis por estos medios en el contexto actual. Videollamadas, llamadas, mensajes, etc., hay muchas formas de lograrlo.